Aibar, Aybar
Tiene su procedencia en la villa de Aibar, de la Merindad de Sangüesa (de donde lo tomó), donde tuvo dos casas: una en el barrio de Arriba y otra en el barrio de Abajo, y de aquí en Estella, Tudela, y en otros lugares de Navarra.
No sólo hubo en dicho Reino caballeros de este linaje. De sus dos casas de la villa de Aibar salieron también ramas que fueron a establecerse en Aragón, en Baeza (a poco de su conquista), y en la Alcarria, en Lupiana (Guadalajara).
Es uno de los más antiguos linajes de Navarra, hasta el punto de que algunos tratadistas dicen que su origen arranca de tiempos del Rey godo Recaredo.
En el año de 198 era Capitán de los vascos un valeroso Caballero, llamado Orosio. Tenía unas fuerzas tan hercúleas, que al enemigo que cogía entre sus brazos, lo mataba sin necesidad de utilizar arma alguna.
Esto le hizo famoso, y llegó a ser tan temido de los godos, que le dieron muerte a traición. Dejó un hijo, llamado Esparchio Orosio, de tanto valor como su padre, el cual, en las luchas que sostuvo contra los godos, cayó prisionero de las tropas del Rey Sisebuto. Llevado a presencia de este Monarca, le preguntó Sisebuto cómo se llamaba, a lo que contestó que Orosio, y que no se avergonzaba de decir que imitaba a su padre en el valor. Trató entonces el citado Rey godo de atraérselo, manifestándole que le perdonaba la vida si, con sus tropas, se sometía a su autoridad; pero Esparchio Orosio se negó a esta sumisión, alegando que no podía hacerlo, porque había nacido más leal a su Patria que a sí mismo, y que, por lo tanto, prefería que lo matase, lo que al fin ordenó Sisebuto. Esparchio Orosio dejó dos hijos, llamados Fabio Esparchio y Orosio Esparchio. Este murió poco después que su padre.
Fabio fue Capitán de los vascos, y de él descendió Iñigo Aibar, uno de los doce nobles varones que se eligieron en el año 865 para gobernar Navarra. Un hijo de Iñigo de Aibar casó con Urraca Sancho, y fueron padres de Iñigo Fortún y de Urraca de Aibar.
También nombran diversos autores a Fortún Aznares de Aibar, que casó con su prima Leonor de Aibar, y fueron padres de Gil de Aibar, esposo de Juana de Eguia, de la que tuvo a Jimeno de Aibar, privado del Rey Sancho el Fuerte.
De esta familia fue también Martín de Aibar, Camarlengo de Don Carlos el Noble, quien el 9 de Mayo de 1389, le armó Caballero en Pamplona, junto con otros siete nobles de las primeras familias del reino. Este Martín, del que quedan muchas memorias, tomó parte activa en la gobernación de Navarra.
Descendiente suyo fue Sancho de Aibar, que casó con Juana Iñiguez de Montagut, y tuvieron por hija a María de Aibar, mujer de Mosén García de Falces, Gran Canciller de los Reyes Don Juan y Doña Blanca, de quienes desciende bastante nobleza de Navarra.
Armas
Las primitivas armas de la casa solar del barrio de Arriba, en Aibar, eran: En campo de gules, seis paveses de oro.
La casa del barrio de Abajo, también en Aibar, traía estas otras: En campo de oro, cuatro fajas ondeadas de azur.
Estas mismas usan los Aibar de Estella, según el Cronista Juan José Vilar y Psayla.
Otros, en Navarra, según Diego Ramírez de Avalos: Escudo de oro, sin figuras.
Los Aibar de Aragón: En plata, una faja de gules, y en el jefe, dos cabezas de hombre.
Los de Aragón, según el Cronista Juan Francisco de Hita, usaron: En gules, con una faja de plata, acompañada de dos cabezas de moro con turbante de plata, uno a cada lado.
Los Aybar, de Navarra, según Miguel de Salazar, traen: En campo de oro, una faja de sable. Bordura jaquelada en dos órdenes de plata y gules.
Otros: En oro, una barra de azur, en su verdadera aceptación heráldica, acompañada, en jefe, de dos flores de lis de sinople, y en punta, de otra flor de lis del mismo color.
Otros: En sinople, dos parrillas de oro, puestas en faja.
Otros: En plata, un árbol de sinople y un galgo corriendo, al pie del tronco.
Los radicados en Tudela, según Vicente de Cadenas: En plata, goteado de gules.
Otros: En gules, seis escudos oblongos, de oro y pareados.
En la ejecutoria de hidalguía de Pedro, Luis, Cristóbal, Alonso y Martín de Aibar, realizada en la Real Chancillería de Granada, en 1605, constan las siguientes armas:
Escudo cuartelado: 1º, en campo de oro, tres llaves y tres medias lunas, y bordura de sinople con siete aspas; 2º, en campo de gules, un león rampante, y bordura de plata con ocho flores de lis de sinople; 3º, en campo de sinople, un castillo sobre una roca, y bordura de plata con siete aspas de oro, y 4º, en campo de oro, dos cabras.
Los Aybar, de Navarra, según Miguel de Salazar, traen: En campo de oro, una faja de azur. Bordura jaquelada en dos órdenes de plata y gules.
En el expediente de Calatrava de Luis Urries Aibar, descendiente del palacio de Aibar, en Aibar, se citan estas otras armas: Tres bandas, y sobre ellas tres cruces.
Los Aybar, de Navarra, según José Pellicer y Tobar, traen: En campo de oro, un castillo púrpura, aclarado de azur.
Otros Aybar: En campo de azur, una brújula de oro.
Otros Aybar: En campo de azur, cinco estrellas de plata, puestas en círculo.
Otros Aybar: En campo de gules, nueve bezantes de plata.