Blanc
Este apellido tuvo casas solares en Cataluña, con rama en Cerdeña; en Navarra, y en el Delfinado (Francia), desde donde pasó a España.
En Cataluña tuvo casas solares en La Bisbal, Blanes, Gerona, Pau Ridaura, San Feliu de Guixols y Villahur (Girona), y en Mataró (Barcelona), documentadas en el siglo VXI.
En Navarra tuvo casas solares en la villa de Larraga, de la Merindad de Olite, su dueño Johan Blanc; en el villa de Lerín, de la Merindad de Estella, sus dueños Toda Blanc y Domingo Blanc, documentadas en la Fogueración de 1329, y en la villa de Andosina del Condado de Lerín y Merindad de Estella, su dueño Johan Blanc, documentada en la de 1350.
José Blanc y Sebastiá, natural de Benicarló (Castellón), probó su limpieza de sangre para ingresar como religioso en la Orden de Montesa en 1773.
José Blanc, nacido en Torres de Obispo (Huesca) en 1812, estudió Jurisprudencia Civil en la Universidad de Zaragoza, ejerciendo luego la abogacía en Benabarre (Huesca), por cuyo partido fue elegido Diputado. También ejerció su profesión en Huesca y falleció en Madrid.
José María Blanc y Barón, nacido en Barbastro (Huesca) el 12 de abril de 1845, fue Obispo de Ávila en 1895, en cuya sede gobernó hasta su muerte ocurrida en 22 de enero de 1897.
Jacinto Blanc hizo consulta sobre privilegio de Ciudadano en 1697.
Marcelo Blanc y Brancacia Mayo y Brancacia, natural de Nápoles, probó su nobleza para ingresar en la Orden de Alcántara en 1614.
De la Orden de Carlos III fueron: Alberto Blanc, Gran Cruz, en 1870; Edmundo Blanc, Número, en 1838; Félix Ferdinand Clement de Blanc, Caballero, en 1857; Lucien Blanc, Comendador, en 1919; Luís Guillermo Blanc, Caballero, en 1872; Manuel Blanc, Caballero, en 1851, y Manuel Blanc y Carles, Caballero, en 1863.
Armas
Los de Cataluña y Cerdeña usan: En campo de azur, una banda jaquelada de plata y gules.
Los del Delfinado y su rama en España, según Juan José Vila y Psayla, usan: En campo de azur, sembrado de hierros de lanza, de oro.
Otros: En campo de gules, un chevrón de oro, acompañado en punta de un caracol de plata, sobre un mar de sable, y el jefe de plata cargado de un creciente de azur.