Este linaje tuvo casas solares en Barcelona, Gerona y Perpiñán.

Melchor Coronat, natural de Barcelona, en cuyo convento de Santa Catalina vistió el hábito dominico, profesando en la Orden el 27 de Agosto de 1595.

Jaime Coronat, Burgués y mercader de Perpiñán, obtuvo el privilegio de Burgués Honrado de Perpiñán. Era hijo de Pedro Coronat, mercader de Perpiñán, y de Margarita. Jaime casó con Cecilia Maler y Roig y fueron padres de Juan Coronat y Maler, Burgués honrado de Perpiñán matriculado en 1580, que obtuvo el privilegio de Burgués honrado de Perpiñán concedido por el Rey Don Felipe III en Barcelona el 13 de Julio de 1599 y en Madrid el 23 de Diciembre de 1599.

En campo de gules, tres coronas de oro, puestas dos y una.