Olaizola
Muy antigua es la casa solar de este apellido y radicó en el valle de Oyarzun. Otras casas solares radicaron en las villas de Azcoitia y Azpeitia (Guipúzcoa), documentadas en el siglo XVI.
Joanes de Olaizola, de la Casa de Olaizola del valle de Oyarzun, era vecino de San Sebastián en 1566.
Probaron su hidalguía ante las Juntas Generales de Guipúzcoa y sus Justicias ordinarias: Martín de Olaizola, natural del valle de Oyarzun y vecino de Legorreta, en 1592; Sebastián de Olaizola, vecino de Fuenterrabía, en 1654; Ignacio de Olaizola y hermanos, vecinos de Azpeitia, en 1674; José de Olaizola, vecino del valle de Oyarzun, en 1695; Ignacio y Asencio de Olaizola y Aguirre, naturales de Azpeitia y originarios de Azcoitia, en 1669.
Armas
En campo de oro, una encina de sinople, y un jabalí de sable, pasante al pie del tronco.
Francisco Gómez Arévalo de Villafufre señala que el jabalí es empinado a su tronco.
Algunos ponen un oso empinado al tronco.
Los de Azpeitia y sus ramas en Urrugne, San Juan de Luz, Ciboure, Ascain y Saint-Pée-sur-Nivelle (Francia) usan: En campo de oro, un roble arrancado de sinople y un jabalí pasante de sable y brochante sobre el tronco.
Otros: En campo de oro, dos negrillos, de sinople, terrados de lo mismo.