Payá
En una certificación de hidalguía y blasones expedida en Madrid en el año de 1632, por Jerónimo Villa, cronista y rey de armas de Felipe IV, a favor de don Francisco Payá, se dice que este apellido procede de Cataluña y que tuvo su primitivo solar en el pueblo de Cartellá o Castellá, con lo que nos quedamos sin saber cuál de los dos fue cuna de los Payá, puesto que en Cataluña hay un lugar llamado Cartellá, que pertenece al partido judicial y provincia de Girona, y una aldea llamada Castellá, que pertenece al partido judicial de Seo de Urgel, en la provincia de Lleida, y no cabe confundirlos, ni considerar a los dos como uno sólo.
Ramas de este apellido pasaron al reino de Aragón, València y Mallorca, distinguiéndose alguno de sus antiguos caballeros en las luchas contra los moros.
En la batalla de las Navas de Tolosa en 1212 y en la conquista de València en 1238, participaron algunos caballeros de este apellido, mostrándose como esforzados guerreros.
Este linaje se encuentra emparentado, desde muy antiguo, con el linaje de los Perpiñá, cuyos caballeros se distinguieron también en la conquista de València y en la de Mallorca, en cuya isla quedó asentada una rama de los Payá Perpiñá.
Francisco Payá, Doctor en Derecho. Canónigo de Barcelona, participó, por el Brazo eclesiástico, en los Cortes del Principado de Cataluña, en 1640.
Armas
En campo de azur, una cruz vacía y floreteada, de plata. Bordura de oro, con ocho eslabones de cadena rotos, de azur.
Otros: En campo de gules, una jarra, de oro, Bordura de plata, con la leyenda: “Ave María”.
Otros: Escudo jironado de plata y oro (sic).
Los Paya, según Cadenas, radicados en Barcelona: En sinople, cinco torres, donjonadas, de oro, puestas en aspa.