A una familia de este apellido, cuya procedencia no descubren los datos que tenemos a la vista, perteneció Herrando Talaverano Gallegos, nacido en 1563, Abogado de la Real Audiencia de Granada, Consultor del Santo Oficio de la Inquisición, en 1595, y Teniente de Capitán General de Chile por Real carta dada en Valladolid el 4 de Noviembre de 1602.

Bartolomé Talaverano, natural de Porcuna (Jaén) y vecino de Valenzuela (Córdoba), probó su limpieza de sangre para ejercer el cargo de Familiar del Santo Oficio de la Inquisición de Córdoba en 1603, y su mujer Ana de Aguilera, natural de Porcuna.

Escudo cuartelado: 1º, en campo de gules, cinco flores de lis de oro, puestas en sotuer; 2º, en campo de azur, tres estrellas de oro, puestas en triángulo; 3º, en campo de azur, tres barras de oro en su verdadera acepción heráldica, y 4º, en campo de oro, una banda de gules. Bordura general jaquelada de azur y plata en dos órdenes. 

Así figuran en el sello de un despacho del repetido Herrando, fechado en Concepción el 24 de Mayo de 1617.

Otros: Escudo cuartelado: 1º y 4º, en campo de gules, un castillo, de oro, y 2º y 3º, en campo de azur, cinco estrellas, de oro, puestas en aspa. Jefe, de oro con un águila, de sable.