Figura en primera línea desde hace más de cuatro siglos entre la Nobleza de Canarias la familia flamenca de Westerling, apellido que sus representantes en estas islas escribieron indistintamente Westerlin o Huesterlin.

La Inquisición de Canarias practicó pruebas de la ascendencia de Pedro Westerling Van Trille en 17 de Julio de 1599, que aprobó en auto de 23 de Diciembre de 1602, y consta su nobleza en ellas y en otros instrumentos, entre los que merece especial mención el Memorial del primer Marqués de Celada, nieto de los Westerling, presentado al Rey Don Carlos II en 20 de Febrero de 1685 y escrito por el gran Cronista Alonso Núñez de Castro.

Pedro Westerling y Van Trille, segundo del nombre, Capitán de la Infantería española, Jurado del Cabildo de Tenerife en 1605, Regidor perpetuo y Alguacil Mayor de la Gran Canaria, Familiar y Alguacil Mayor del Santo Tribunal de la Inquisición, calificado en auto de 23 de Diciembre de 1602, Patrono de la capilla del Santo Nombre de Jesús en la iglesia de San Agustín de la ciudad de La Laguna, etc.

Escudo cuartelado: 1º y 4º, en campo de oro, un aspa de gules, y en jefe una estrella del mismo color, y 2º y 3º, en campo de gules, tres mazos de oro.