Tierras improductivas que pertenecían a la Corona y que se asimilaban a los bienes comunales. Solían ser terrenos de pastos y montes, alejados de los centros urbanos, dedicados a pasto para el ganado, aunque en parte también se dedicaban para el cultivo, sobre todo en épocas de crecimiento demográfico. La Corona permitió que los baldíos fueran utilizados gratuitamente por los vecinos de los Concejos a cuyos términos pertenecían.
 
Fuente: “Diccionario Histórico de la España del Siglo de Oro”, de Annie Molinié-Bertrand. Acento Editorial
"Diccionario de términos de Historia de España -Edad Moderna-" de Justina Rodríguez García-Josefina Castilla Soto. Ariel Practicum