Conversos
Los judíos conversos, o marranos, eran los judíos recién convertidos al catolicismo. Marrano tenía una connotación peyorativa e infamante evidente. Se les acusaba de practicar un judaísmo clandestino y de ser unos malos convertidos. El primer estatuto de pureza de sangre adoptado en 1449 por Toledo perseguía excluir a los cristianos nuevos de los cargos municipales. El tribunal del Santo Oficio de la Inquisición fue creado en 1478 contra los conversos judaizantes y sus descendientes, y en 1492 los judíos fueron compelidos a convertirse o a abandonar España.
Fuente: “Diccionario Histórico de la España del Siglo de Oro”, de Annie Molinié-Bertrand. Acento Editorial