Expolios y vacantes
Los expolios eran los bienes y rentas eclesiásticas que dejaban al morir los obispos, los cuales no podían testar. Los expolios pasaban a la Santa Sede, hasta que por el Concordato de 1753 el Estado se encargó de administrarlos, destinándose el producto obtenido a obras benéficas y necesidades de la Iglesia.
Las vacantes eran las rentas que producía el obispado hasta que el nuevo titular ocupara la mitra.
Fuente: "Diccionario de términos de Historia de España -Edad Moderna-" de Justina Rodríguez García-Josefina Castilla Soto. Ariel Practicum